Thursday, June 22, 2006

LA CRIMINAL CRISTIANDAD


“ Y dijo el Señor a Moisés: Retiraos de en medio de esta turba; que ahora mismo voy a acabar con ellos. Y estando postrados en la tierra los dos, dijo Moisés a Aarón: Toma el incensario, y cogiendo fuego del altar, pon encima del incienso, corre a toda prisa hacia el pueblo para rogar por él: porque ya el Señor ha soltado el dique a su Ira, y la MORTANDAD se encruelece”

La Biblia, Números Cap, XVI, vers, 44,45,46…

Hace solamente cinco siglos, la “diabólica” Iglesia Católica Apostólica Romana era co-propietaria del Estado monárquico, juntos formaron un divino-Estado totalitario que nos recuerda a los fascistas y a los nazis en su ansia de exterminio humano. Millones de personas fueron arrojadas a las hogueras por pensar diferente a la religión oficial del gobierno de ese entonces. Las creencias opuestas a esta institución fueron llamadas “infieles” o “diabólicas” y eso le daba el aval al Estado monárquico de encarcelar, torturar, asesinar a cualquier opositor al orden religioso-político impuesto. El filósofo Giordano Bruno, la guerrera Juana de Arco, el libertador indígena Atahualpa, el gran maestre de los Templarios Jacques de Molay, entre muchas otras personas que cambiaron la historia fueron quemadas vivas por el monstruoso imperio de Yavé. Los llamados “papas” o “cardenales”, como los Borgia, se indigestaban de festines y orgías, mientras mandaban a matar gente en nombre de Dios, tenían un poder magnánimo sobre el Estado y las clases millonarias y así eran consideradas “divinas”. Y claro, recientemente el ya fallecido papa Juan Pablo II, con tanta hipocresía, pedía disculpas ante la atrocidad sin nombre que cometió “la Iglesia” por su afán imperialista de imponer y expandir sus creencias imperialistas al mundo entero. Hoy en día, todavía hay millones de humanos que dicen ser cristianos y no aceptan la inherente falsedad e hipocresía de su religión y de sus “Iglesias”. ¿Pero cómo nacen y por qué fueron creadas estas instituciones religiosas “divinas” genocidas y totalitarias? ¿Cuál fue el propósito del paradigma monoteísta moralista y racional?¿Por qué fueron exterminadas del mundo occidental las creencias de los pueblos originarios opuestas al judeo-cristianismo, como el paganismo o el animismo?

Para adentrarnos en la psicología histórica de las religiones, es necesario tomar en cuenta que creer que la “verdad de la divinidad” es propia solo de un solo pueblo o de una sola cultura, esto es etnocentrismo y arrogancia, NADIE es poseedor de la verdad última de nada. Así que para hacer un análisis histórico de cómo nacen las religiones es obvio que una neutralidad es absolutamente necesaria. En este contexto me limitaré a observar los hechos históricos y sociales que cambiaron el mundo en nombre de estos “dioses” y “diablos”.

Sabemos que el humano es en esencia un animal religioso, que al tener la capacidad de reflexionar sobre su propia existencia lo hace inquietarse por su origen, su razón de ser, su propósito en la vida y la búsqueda de dioses es la prueba de su debilidad y miedo al misterio. Para el común de los mortales es “Dios” quien responde sus inquietudes y es el “concepto” o “palabra” que los místicos pusieron a sus experiencias de unidad con la totalidad. Sin embargo, esta creencia le hace olvidar el misterio principal de la existencia humana que es el sentido del universo, por eso la creencia en Dios no llena el vacío de lo desconocido ni del misterio, y el Dios de los místicos no puede ser “Omnisciente” ni “Omnipotente” ya que hay un factor desconocido que anula todo lo que puede ser conocido; la NADA no puede ser conocida, quizá por ello los taoístas y budistas llaman así a sus experiencias místicas inefables y no Dios, “el nirvana es la NADA”, la anulación de la polaridad, vivir y sentir la divinidad primordial y unificarse con el cosmos. Seis siglos antes de Cristo nacieron Zaratustra, Lao Tsé, Confucio, y ellos crearon a partir de sus experiencias místicas las principales religiones del mundo “oriental” que en definitiva son mucho más espirituales y sensatas que las nefastas religiones de “occidente” y “medio oriente”. El budismo y el Taoísmo son religiones que no tienen “dioses”, el humano es el dios que puede por la meditación trascendental ascender al éxtasis de la experiencia divina y al “Cielo”, es decir que para estas religiones “el Cielo” y el “Paraíso” están en la Tierra, en la Vida misma y no después de la muerte, ya que los seres humanos son los dioses.

Lamentablemente las creencias en “occidente” descienden del Antiguo Egipto y de la Antigua Grecia en la que todavía el ser humano cree en un ser superior, haciéndolo inferior, servil y esclavo. En Egipto nacen las primeras religiones monoteístas y así el complejo de inferioridad se acentúa, pues la creencia en un solo dios o “Señor” que está en el “Cielo” es más servil y decadente que el politeísmo originario en la que hombres y mujeres eran mezclados con dioses y diosas. Pero la creencia en un solo dios se expandió justamente entre los esclavos de los Egipcios que devino en lo que es ahora el Judaísmo. Esta religión adora a un Dios que pide hasta matar y asesinar a sus propios hijos para mostrar fidelidad, además de ser el “Señor”, es decir el AMO de los esclavos. Es comprensible entonces que esta religión de esclavos predique hasta el día de hoy la esclavitud y la servidumbre, ya que el sistema social y económico que domina la sociedad “occidental” es propio de esclavos, por algo se predica que el Reino de los Cielos, que como ya vimos debe estar en la Tierra y en la Vida y no en el Cielo después de la muerte, es de los pobres y los desposeídos, es decir de los esclavos. Fueron miles de años de guerra santa para que el judaísmo se convierta en religión oficial en Egipto, en Grecia y en Roma, los sacerdotes fariseos empezaron a tener mucho poder, ya que la decadencia humana masificó la esclavitud gracias a la nueva religión monoteísta. Abraham, Moisés, Isaac y otros patriarcas judíos vinieron a predicar la palabra de Dios con sangre, atrocidades y masacres, pues recordemos que las pestes que azotaron y exterminaron a medio Egipto fueron supuestamente provocadas por el dios de los judíos, así como muchos diluvios y lluvias de fuego para exterminar a los humanos, como ocurrió en Sodoma y Gomorra que fueron ciudades supuestamente “castigadas” bajo las llamas por tener otro comportamiento sexual que prohibía Yavé.

Hoy en día hay gente que todavía tienen estas creencias retrógradas de esclavos-elegidos por su monstruoso Dios. Y gracias a un “simpático judío” llamado Jesús de Nazareth, se masificó y se expandió la creencia monoteísta patriarcal. Jesucristo no vino a traer paz y amor, sino la guerra, la espada y la división, para que los esclavos se rebelen contra el politeísta imperio romano y para decirles que son “corderos buenitos” de Dios, es decir ovejas gregarias a las creencias de aquellos que tienen la “palabra de su Padre”, los sacerdotes que impusieron la religión judaica patriarcal con sangre y matanzas. Muchos de los primeros cristianos fueron arrojados a aceite quemado y a los leones o crucificados como su Maestro, especialmente por el odio de los sacerdotes judíos fariseos y por los emperadores romanos politeístas que veían en el judeocristianismo una verdadera amenaza para toda la humanidad. Jesucristo era un mago que convertía el agua en vino, multiplicaba la comida para todos, podía caminar sobre las aguas, curaba a los enfermos, daba la vista a los ciegos y resucitaba a los muertos, sin embargo, adoraba al mismo diabólico Dios traidor y castigador llamado Yavé, ¿es decir que transaba con dios y con el diablo? Sus enseñanzas simbólicas en forma de parábolas fueron tan fuertes que después de unos tres siglos el emperador romano Constantino declaró al cristianismo como religión oficial, así los ricachones romanos imperialistas construyeron el cuartel del diablo llamado Vaticano o Iglesia Católica Apostólica Romana, para expandir por todo el mundo el cristianismo con la ayuda de las criminales caballerías espirituales como los Templarios, que defendían a la Iglesia con guerras y masacres. No hay que olvidar nunca que las “cruzadas” fueron guerras imperialistas piratas por la ocupación de Jerusalem, en donde estos Templarios arrasaban pueblos enteros en su afán de conquista mundial. Cuando estos “místicos guerreros” de la Orden del Temple llegaban a cualquier población de los sarracenos, violaban y mataban en nombre de su Dios y ahora el mundo “occidental” es tan hipócrita que piensan que los Templarios eran los “héroes” defensores de los peregrinos cristianos, nada más alejado de la realidad, eran soldados piratas que hacían exactamente lo que están haciendo los cristianos soldados británicos y norteamericanos en Irak.

Así se asienta el cristianismo en el poder de “occidente”, las enseñanzas cristianas se iban acoplando con el decadente platonismo socrático moralista y monoteísta. Pronto aparecieron esos filosofastros cristianos llamados los “padres de la iglesia” como San Agustín o Santo Tomás cuyas filosofías solo eran una reproducción del decadente platonismo que dividía al mundo en “aparente” e “ideal”, la idea perfecta para que la Iglesia llame “Cielo” al mundo ideal y “Tierra” al mundo sensible aparente y supuestamente falso, un crimen contra la VIDA y el espíritu. Esta brutal castración de la psiquis anuló el pensamiento mítico-mágico-pagano y fue la base para que la Iglesia se convirtiera en la nueva Policía del Espíritu y empezar la criminal e imperdonable Inquisición en donde el judeocristianismo se convirtió en la religión oficial de la esclavitud con su feudalismo y posterior capitalismo. Muchos pensadores han demostrado que el capitalismo se acopla a las creencias judeocristianas perfectamente, ya que la esclavitud del “dinero” es bendecido por dios, ahora es mucho más comprensible que los multimillonarios de Europa y EE.UU sean judíos, masones y cristianos, si ellos son los Padres del Capital y son los “elegidos” por Yavé para imponer su Imperio Mundial…George W.Bush, escogido por el diabólico Yavé, ha mandado a arrojar Uranio Empobrecido en tormentas de arena sobre Irak y en Afganistán en los últimos años, en su Plan de exterminio humano y Gobierno Mundial, haciendo al pie de la letra lo que la cruel y satánica Biblia judeocristiana dice sobre Sodoma y Gomorra...¿Cómo puede haber Justicia si el supuesto Creador del Cosmos es el más injusto y perverso?¿Quién puede mandar a un Tribunal de Justicia a Dios? E.M Cioran decía: “La armonía, universal o no, no existió ni existirá jamás. En cuanto a la justicia, para creerla posible, para imaginarla simplemente, habría que gozar de un don de ceguera sobrenatural, de una elección desacostrumbrada, de una gracia divina reforzada por una gracia diabólica, y contar, además, con un esfuerzo de generosidad del cielo y del infierno, esfuerzo, a decir verdad, altamente improbable, tanto de un lado como del otro… No hay paraíso más que en el fondo de nosotros mismos “