Sólo quien ha vivido en carne propia la vil traición y la bajeza de la putrefacta y decadente humanidad, puede entender en verdad que es la Lealtad, la Fidelidad y el Honor.
Ser Leal es ser RECTO, FIEL, HONRADO, primero con uno mismo, y después con los demás, porque si uno NO es fiel consigo mismo, jamás lo será con los demás. Ser recto es ser impecable con sus acciones-intenciones, ser ligero de sangre liviana, jamás arrepentirse de nada, actuar con el instinto nítido, puro en los pensamientos, puro en los sentimientos, y sobre todo no decir nunca “sí, perdón cometí un error”. El humano es el animal que tropieza mil veces con la misma piedra porque no es leal consigo mismo, porque no aprende de sus errores, porque no es recto, ni honrado ni leal. Si uno se engaña a sí mismo, jamás va a ser leal con los demás, siempre será una persona hipócrita en quien no se puede confiar, y en quien hay que tener mucho cuidado, porque ir a la guerra con un traidor es realmente un suicidio.
Ser Fiel es ser coherente con lo que uno piensa, tener FIRMES las propias convicciones y exaltar los valores de la VERDAD, LA HONESTIDAD, LA SINCERIDAD, porque quien camina en el sendero del CONOCIMIENTO debe ser leal y fiel a la verdad y a la transparencia. Ser real con uno mismo lo refleja en el resto, quien no se miente a sí mismo no miente a los demás, quien tiene seguridad de su potencial y conoce bien sus debilidades y fortalezas, nunca caerá en el “perdón cometí un error”. Hay que saber diferenciar bien la verdad de la mentira para ser Fiel a sí mismos, saber diferenciar la hipocresía de la veracidad para no caer presas de la inmundicia y la vil farsa que domina este mundo, donde la mentira, la falsedad, el engaño, y la corrupción se han convertido en las columnas incólumes que sostienen a toda esta extraviada sociedad.
Pero si uno es constante, imperturbable y firme consigo mismo, verdadero con lo que uno cree y hace, leal a sus convicciones, jamás se traicionará a sí mismo y no traicionará a los demás, porque quien es TRANSPARENTE como el agua clara y limpia de la fuente, es verdadero y leal.
El ejemplo claro de la podredumbre actual es El Hipócrita Camaleón, que cambia de piel cada cierto tiempo, que no es constante, que no tiene valores, que no es firme en sus convicciones. Por su vacío inherente en su perturbada psique se define a sí mismo con máscaras, ideologías y etiquetas que la sociedad de la mentira le inculca, es un producto mismo de la sociedad de la mentira, y nunca es real, nunca es leal, es un traidor por excelencia… (como aquellos débiles mentales que un día son satanistas, otro día son oshistas o rojistas, otro día son comunistas o caoístas, y otro día son gnósticos, hitleristas, dan pena, no tienen personalidad)…nunca se mantienen firme en sus creencias porque pasan engañándose a sí mismos, saltan de ideología en ideología porque no se encuentran a sí mismos, no tienen un centro definido, y cuando se meten en una organización o secta, al otro día la están traicionando porque no son inquebrantables ni leales, son traidores. No se conocen a sí mismos, porque dentro suyo solo hay un vacío, su degradada psique les impide ver quiénes son, y nunca se conocerán si buscan siempre la etiqueta, la ideología y la máscara que les defina. Esas personas jamás serán fieles consigo mismos, porque no conocen la LEALTAD, no saben lo que es la FIDELIDAD, y mucho menos lo qué es el Honor….son solo seres de plastilina.
Tener Honor es tener la cualidad moral que impulsa al cumplimiento del deber consigo mismo, ser digno es tener respeto a sí mismo y por lo tanto hacia los demás. La persona con honor jamás se traiciona a sí mismo y menos traiciona a sus amigos. Quien no se respeta a sí mismo y no sabe quién es, pasa saltando de ideología en ideología, de secta en secta, de máscara en máscara, como el camaleón, por su debilidad y vacío, su falta de integridad y de lealtad, está irrespetándose a sí mismo, y mucho menos va a respetar a los demás. Carece totalmente de dignidad, es indigno, y nunca sabrá lo que es la verdadera amistad (aquella amistad/hermandad en la que uno da hasta la vida por el buen amigo, por el hermano, por el compañero de batalla). Los camaleones carecen de Honor, carecen de valentía, son cobardes porque no quieren enfrentarse a sí mismos, y son solo un producto desechable de esta inmunda sociedad de la hipocresía…
En el aprendizaje de la VIDA uno tiene que toparse con esta calaña de gente para entender la TRAICIÓN, para diferenciarla de la verdadera lealtad, para saber bien quien mismo es amigo y quien no, para que cuando uno esté en la guerra no cometa el error de confiar en un Camaleón.
…y personalmente, les agradezco, ahora entiendo mejor qué es la Lealtad, no tengo resentimientos ni odios, a pesar del daño que me han causado por su vil traición, siempre es bueno que el traidor se muestre tal como es, porque A LOS DESLEALES ES MEJOR DESECHARLES…
